Era 14 de diciembre, el día estaba gris pero las calles vacías y blancas de la nieve que caía poco a poco y las carreteras llenas de coches por la gente que venía de los pueblos cercanos.
Cerca de la calles de los grandes hoteles, en el medio del puente se encontraba Emily con los ojos llenos de lágrimas y mirando al agua tirarse o no tirarse esa era la cuestión. Tirarse le ayudaría a escapar de los problemas, de la tristeza, de los malos ratos y de esa presión que tenía en el pecho que no la dejaba respirar .No tirarse eso le haría más fuerte, más luchadora ¿pero a quién quería engañar? Ella no era fuerte ,ni luchadora, cada vez que la presión la invadía se encerraba en su cuarto a llorar, ¿podría aguantar esa presión? ¿podría aguantar vivir sin él? ¿sin hablarle?¿sin tocarle? ¿sin besarle? … mientras se hacía esas preguntas se iba acercando más a la vaya que protegía de la gran altura en la que se encontraba el puente. Voces en su interior la gritaban ‘’tirate tirate tirate’’
-no te tires…- le dijo una voz suave en su corazón.-no te tires por favor, ven a por mi, si vienes te prometo que volveré... por favor.-Emily sentada en la barandilla del puente se quedó paralizada ,miró el reloj y empezó a correr con todas sus fuerzas en quince minutos salía el tren en el que iría Simón.-no te quiero perder!-gritaba llorando Emily mientras corría, la gente la miraba y se apartaba, pensaba que estaba loca ,si, estaba loca pero loca de amor no quería perderle. La nieve caía con más fuerza pero eso no importaba , aunque se cayera volvía a levantarse no le importaba ese dolor no quería perder tiempo, tenía que verle, no le dejaría marchar. Mientras corría recordaba lo que paso ese día, el día que Simón le dijo que se tenía que marchar, por el trabajo de su madre,.Desde ese día no volvieron a hablar, no se vieron, perdieron contacto.
Y por fin llegó a la estacón, las siete justo, Emily cogió aire y volvió a correr, la multitud de la gente le impedía a avanzar pero por fin llego al tren, buscaba por todos los lados pero no estaba.-le perdí…¡le perdí!-decía llorando y mirando por las ventanas del vagón. De repente alguien dio un golpe en una de las ventanas, Emily se giró y allí estaba él, con lágrimas que se desplazaban por su rostro, sus manos se intentaron agarrar pero les impedía el cristal
-¡quiero que sepas que te quiero!- gritó Emily
-¿Qué?
-¡que te quiero!- gritó más fuerte, pero el no podía oírla entonces Emily hecho aliento en el cristal y escribió ‘’te quiero’’ Simón cerró lentamente la mano que estaba apoyada en el cristal y pegó una notita en la ventana de las que ella y su padre se escribían: ‘’yo no te quiero, yo te amo Emily, aunque esto sea un adiós pronto será un hola, te lo pido no sufras nos veremos pronto, te amo amor mío…’’ Emily al leerlo empezó a llorar y soltó una sonrisa. El tren dio la llamada de salida y lentamente iba avanzando, Emily no se apartaba de la ventanilla, siguió al vagón hasta el borde de la calle. Emily se quedó mirando como se iba alejando el tren y allí se produjo el adiós de esos dos enamorados un adiós que pronto se convertiría en un hola…
Continuará....~
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